Uno de los pueblos más bonitos de la Sierra de Guara es Alquezar. Una maravilla perfectamente integrada en un impresionante paisaje de roca caliza modelado por el rio Vero, que ha creado a lo largo del tiempo el cañón que hoy nos disponemos a atravesar. Se encuentra dentro de los límites del mayor espacio natural protegido de Aragón, el Parque Natural de la Sierra y Cañones de Guara, uno de los principales refugios de flora y fauna de Europa.


Iniciamos la ruta en el aparcamiento, atravesando todo el pueblo hasta llegar a una senda descendente que, a través de una serie de escaleras y plataformas, nos llevará hasta el rio Vero. Por el camino vamos encontrando muchísima vegetación, entre la que destacan los chopos o las zarzamoras.










Después de visitar la cueva de Picamartillo, una gran oquedad formada en la roca caliza a la que no podemos acceder por la cantidad de agua que lleva el rio, giramos a nuestra derecha para pasar por las pasarelas metálicas colgadas literalmente de la roca y continuar el camino. En algunas zonas podemos contemplar las antiguas pasarelas. ¡Cuidado los que tengáis vértigo!





Pasamos por la pequeña presa que alimenta una minicentral eléctrica recientemente restaurada, hasta que llegamos a un bonito mirador sobre el río.



A continuación abandonamos el barranco del río Vero para remontar a través de una pequeña pendiente la vuelta a Alquezar.


Las vistas son impresionantes ¡Un bonito descubrimiento!