Las Cuevas de Bétharram son una catedral natural construida milagrosamente durante miles de años por el agua proveniente de los Pirineos Franceses . Están situadas muy cerca de Lourdes, en la frontera de los departamentos de los Pirineos Atlánticos y los Altos Pirineos y de las regiones de Aquitania y Mediodía-Pirineos, al sur de Francia. Fueron descubiertas en 1810 y abiertas al público en 1903 por León Ross.
El guía nos cuenta que constan de 5 pisos, con 80 m. de desnivel y más 3 kilómetros de galerías excavadas por las aguas. Están en movimiento perpetuo, y el agua continúa lentamente su trabajo de construcción a través de las grietas subterráneas existentes en la caliza.
Por las distintas galerías podemos ir contemplando las increíbles estructuras, creadas por el modelado karstico. Este modelado recibe su nombre por una región eslovena en la que se produce este tipo de relieve y donde fue estudiado por primera vez.
Las calizas son rocas compuestas de carbonato de calcio (CaCO3) y se caracterizan por:
- Ser impermeables, aunque dejan pasar el agua con facilidad cuando están agrietadas a través de sus fracturas.
- Ser insolubles en agua, aunque sí solubles cuando el agua va cargada de CO2, dando lugar a bicarbonatos según la siguiente reacción.
Este proceso se llama carbonatación y de esta manera la caliza es arrastrada en disolución, dando lugar a las distintas estructuras que encontramos en las cuevas.
Circulamos por una falla por donde vamos descubriendo sus diferentes niveles.
Barca navegando por el interior de las cuevas.
También montamos en un pequeño tren que nos condujo al exterior de las cuevas.