El último día nos acercamos al sorprendente Bosque de Oma, de nuevo en la Reserva de la Biosfera de Urdaibai. Es una obra del escultor y pintor Agustin Ibarrola que durante tres años en los ochenta, se dedicó a realizar una serie de pintadas, en los troncos de un bosque de pinos, que, mirados desde determinadas posiciones, representan figuras geométricas, humanas y animales. Se trata de una muestra de la relación entre la naturaleza y la presencia humana.
Salimos del aparcamiento, en dirección a la cueva de Santimamiñe, por unas bonitas escaleras a través de un viejo encinar.
Volvemos por estas mismas escaleras y emprendemos camino dirección al pueblo de Oma.
Pasado el pueblo giramos a la derecha para entrar a través de una puerta giratoria en el propio bosque de Oma. Una magnífica colección de pinturas que nos mantiene entretenidos durante un buen rato.
Un magnifico y sorprendente viaje a unas de las comunidades que están por descubrir, con la mejor compañía de La Senda de Arroyo. ¡Hasta la próxima!