La última ruta comienza en el pueblo de Parada do Sil, y se denomina Camino Natural de la Ribeira Sacra. Este nombre proviene de la gran cantidad de edificios religiosos que conserva, de los que pueden visitarse 18 monasterios.
El camino discurre a través de una «carrioza», sendero estrecho entre dos paredes rodeado de un bosque de robles con ejemplares de gran tamaño, hasta llegar al cercano pueblo de Castro. Una vez que hemos repuesto agua en este lugar, comienza una fuerte pendiente del 12% que desciende hacia el monasterio de Santa Cristina. Desde este punto se puede acceder al monasterio, bajando entre castaños centenarios por un corto tramo escalonado.
Después de reponer fuerzas en el monasterio continuamos camino a través de un desnivel en zig zag entre madroños y castaños que llega a dos miradores del cañón O Curral do Penso y Os Balcóns dos Mouros (o de Madrid), donde pudimos contemplar los impresionantes cañones del Sil.