Durante el verano también se realizan fantásticas rutas de senderismo. En esta ocasión nos hemos acercado a realizar una senda circular al Monte Buciero, junto a la localidad de Santoña, con una extensión aproximada de 12 km, incluyendo el descenso al Faro del Caballo, entre un precioso bosque de encinas, laureles y madroños. Durante el recorrido también encontramos numerosos fuertes y baterías de artillería de la época napoleónica.
Comenzamos la ascensión con unas impresionantes vistas de la ciudad de Santoña y de las marismas adyacentes por la carretera que nace en el camino, para enseguida divisar la playa de Berria, a la que volveríamos por la tarde, y el Penal del Dueso, antiguo Fuerte Imperial de tiempos napoleónicos.
A partir de aquí podemos empezar a contemplar los impresionantes acantilados que nos acompañaran durante todo el recorrido hasta llegar al Faro del Pescador.
Este faro entró en funcionamiento en el año 1864, empleando una lámpara de aceite de oliva; hubo de ser reconstruido y modernizado tras sufrir graves daños causados por un ciclón en 1915.
A partir de aquí, el camino se complica por la cantidad de piedras en el camino hasta llegar al Faro del Caballo, de acceso accidentado y costoso, que supone un vertiginoso descenso de casi 700 escalones, 800 si se desciende hasta el mar. Este Faro, puesto en funcionamiento en 1863, se encuentra en la actualidad abandonado.
Cuando nos hemos recuperado del tremendo esfuerzo, ya sólo que da seguir camino adelante hasta llegar al punto de partida.
Por la tarde, como colofón a tan excepcional ruta, nos acercamos a la Playa de Berria para comer y darnos el merecido baño en las aguas del cantábrico.
Una excelente ruta veraniega con nuestros amigos del Club de Senderismo de Arroyo de la Encomienda.