El alumnado ha participado en una actividad tan original como útil: la creación de fiambreras a partir de envases de tetrabrik reciclados. Una iniciativa que no solo fomenta la creatividad, sino que también refuerza valores fundamentales como la sostenibilidad, la reutilización de materiales y el compromiso con el medio ambiente.
Nuestros estudiantes aprendieron paso a paso cómo convertir un envase que normalmente terminaría en la basura en un práctico recipiente multiusos. El proceso incluyó:
- Limpieza y secado del envase
- Doblado y cortes estratégicos para dar forma
- Cierre mediante velcro o botones reutilizados
- Decoración creativa y personalizada con materiales reciclados
Más allá del resultado final —unas fiambreras únicas, coloridas y reutilizables—, la actividad puso el foco en la importancia de repensar el uso de los recursos que tenemos a nuestro alcance. Cada tetrabrik salvado de la basura se convierte en una herramienta para educar, crear y actuar frente al problema de los residuos.
Además, este pequeño gesto tiene un gran impacto: si cada estudiante reutiliza su fiambrera reciclada a diario, se evita el uso de cientos de bolsas, envoltorios de plástico o papel de aluminio a lo largo del curso escolar.
Esta actividad no solo deja una enseñanza práctica, sino que siembra conciencia: cuidar el planeta empieza por las decisiones cotidianas. Reutilizar, reducir y reciclar no son solo palabras, sino acciones que podemos integrar en nuestra vida diaria de forma divertida, educativa y comprometida.
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